Los mileuristas y los MIL
EUROS de hoy.
Los tiempos indudablemente cambian a veces
para mejor y
otras por desgracia a
peor, ahora nos toca
vivir creo lo peor porque según todos los expertos
ya han pronosticado lo que se avecina en
los próximos años porque dicen que la
época de las vacas
gordas ha pasado y ahora están
con nosotros las
vas flacas, yo mas
bien diría las
vacas locas por ponerle
un adjetivo ligero.
No hace
mucho ni hay que
recurrir a los
archivos o hemerotecas para recordar
aquella frase tan común que
se pronunciaba en
los bares, restaurantes,
universidades, reuniones de amigos y
como no en
los mas conocidos
programas de radio y
televisión “ esto es un
desastre esto es un
país de mileuristas, aquel
que superaba esta
barrera de los mil euros ya
había que preguntarle a
que se dedicaba, que profesión tenía o que carrera.
Por aquel
entonces que no ha pasado ni
un lustro, había cierto
recelo y critica hacia las empresas,
porque no te reconocían tus conocimientos, ni especialidades, ni títulos etc. etc., a la
hora de pagarte,
pero como se suele decir
se iba viviendo con “recortes” pero medidos y
controlados, sabíamos que aquello no
era para tirar
cohetes, pero uno se iba ajustando y no te lo tenían
que repetir tantas
veces como sucede hoy en
todos los medios de
comunicación.
Con los
mil eurillos vivíamos y
otros sobrevivían dependiendo
de las
obligaciones domesticas contraídas, incluso daba
para algún que
otro caprichito, tomarte alguna
vez unas cañitas, alguna cenita con la
compañera en fin los mil
eurillos te daban
vidilla, incluso pagabas la letra
del coche y los que
tenían una hipoteca cortita hasta llegaban a
pagarlas, también daba para otros
escarceos, pero ya dependía si
tu pareja también estaba en el grupo de los mileuristas.
El concepto del cambio ha sido muy
importante siendo lo mismo,
únicamente que la situación
ha tomado un rumbo diríamos que
desconocido por no ser catastrofista y llamarle
rumbo diabólico, aunque las
cosas es mejor
llamarles por su
nombre, para qué vamos
a darle tantos
adornos al final todo se sabrá.
Cuando me
refería al concepto del cambio
me refería al
modo de tratar las cosas
o las palabras así que iremos
a lo que
se trata, hasta hace
no mucho los que ganaban
mil euros lógicamente se les llamaban
mileuristas pero
todos sabemos con que
tono y las connotaciones
que tenía, hoy todo
ha tomado otro
cariz, cuando nos
encontramos con amigos o compañeros le
preguntamos ¿ que haces
o a que te
dedicas ? a lo que
el interesado te
responde: trabajo en tal
empresa y gano mil euros pero ya
en un tono como mas
serio y de peso, marcando
las silabas.
Todo aquello misterioso de un
trabajo nuevo he perdido su
interés, de momento no importa cual es el
trabajo, que perspectivas hay, que
horario tienes, que duración va
a tener
el contrato, ¡ ah ¡ y preguntar lo
justito para no
incomodar al contratador no vaya
a ser que una
pregunta indiscreta te
cesen fulminantemente, pero eso si
ya tienes trabajo, porque para
como está el patio eres
un privilegiado.
Además no se atreven
a decir que tiene la
carrera de… porque como sea superior al del entrevistador puede peligrar, así
que a desarrollar el nuevo trabajo que hay amigos
que llevan casi dos años sin dar
palo al agua y no por falta de
ganas.
Como han cambiado las cosas, antes
los estudiantes pensando que carrera
tendría mejor salida y lógicamente cual sería la evolución de
sus ingresos aproximados con el
paso del tiempo. Ahora lo importante es
poder acceder aunque sea de
practicas para que te
vean y ver la
posibilidad de poder
seguir en la empresa.
Ahora el
espíritu luchador por
ascender, tener unos
mejores ingresos y una visión de
futuro se ha convertido
para jóvenes y
experimentados todo en
supervivencia, lo cual
el estimulo desaparece y los
valores humanos y profesionales
quedan estancados hasta que amaine el temporal
que nos azota.
Hace años
que habíamos perdido
la noción y
el conocimiento del valor
de las cosas, hoy una vez
mas y por
desgracia, la escasez aviva el
cerebro, activa las
neuronas y surgen las ideas,
de ahí el refrán “
a grandes males
grandes remedios “
Y todo por
culpa de los acontecimientos y
las circunstancias aunque como dije al
principio los mileuristas de
antes y los
de mil euros de ahora , ambos perciben lo mismo, pero me
gustaría que hubiera algunos
millones de estos parados en
la antigua lista de
los mileuristas
José Aguilar
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